Advertencia: Este post/entrada contiene divagaciones de domingo mal expresadas y sacadas de la cabeza de una persona que mañana tiene que madrugar y que sabe que debe de irse a la cama dentro de como mucho 20 minutos.
Esos momentos en los que no quieres reconocerte a ti misma lo que te pasa/sientes,
te plantas ante ti misma con un montón de razones que te dicen que que lo que hay dentro de la botella es leche, pero tu misma te obcecas a pensar que en lo que en realidad hay es humo, abres la botella, y sin embargo huele leche y no sale a humo, metes el dedo y está humedo...Sin embargo sigues teniendo la maravillosa idea que lo que hay ahí no tiene porque ser leche sino humo de cachimba el cual es posible que te hayas equivocado al olerlo y que habrá seguramente alguna extraña razón por la que el humo no salga.
Finalmente te das cuenta de lo que tienes delante de tus narices es leche, si amiga mía, es blanca como el humo pero más densa,huele a leche, sabe a leche y ahí no hay humo de ningún tipo...
Y piensas, mierda, estaría bien aun creer que es humo de cachimba pero no, lo que hay ahí es leche, con todas y cada una de sus consecuencias. Genial.
Aunque en el fondo del todo siempre sabemos las cosas aunque no queramos reconocerlas.
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