lunes, 9 de junio de 2014

Pedazo de nada.



Un pedazo de nada
escondido tras los jirones de una piel,
una llama apagada,
de alguien al que su luz se le fue.

¿Quién crees que eres?
¿qué crees que tienes?
¿qué mereces?
Y el eco le susurró al oído "nada".

Si se te ocurre buscar una sonrisa que te siga,
una ilusión que te abrace,
una cadencia que no se marchite,
vuelve a dormir y sueña.

Dejaste que te arrancaran las alas,
nada más nacer
dejaste que tu corazón se quebrase
como el trino que no fue.

¿Qué te falta para convertirte en piedra?
¿Cuántas decepciones puedes soportar?
Quizá sea cierto eso,
de que cada uno deba estar donde está,
y quizá...quizá...

Y ya no sabes dónde marchar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario